DINÁMICAS PARA LA PRIMERA REUNIÓN. EJEMPLO 1.
REUNIÓN CON LAS FAMILIAS: UN CAMBIO DE CONCEPTO.
La escuela es una ventana que la vida y estamos obligados a adecuarnos a los tiempos.
Las familias son parte integrante del sistema y el Covid está siendo la excusa perfecta para devolverlas al destierro, para volverlas a sacar fuera de un espacio al que pertenecen en esencia.
Pequeños detalles como limitar las entradas, delegar todo tipo de contacto al ámbito virtual o simplemente poner barreras comunicativas, nos alejan del concepto de identidad de una verdadera escuela.
En las reuniones estamos acostumbrados a bombardearles con normas, reglas y con lo que nosotros desde nuestra mirada, queremos que hagan.
Yo me pregunto ¿ les ofertamos cuáles son nuestras obligaciones?, ¿ les informamos de qué ofrecemos desde el punto de vista del acompañamiento, la acogida y las emociones?.
¿Nos hemos planteado alguna vez que las familias pueden necesitar un periodo de adaptación para ubicarse en el colegio ?, ¿ somos conscientes de que nos entregan cada día lo más valioso que tienen?.
Yo hace mucho tiempo que entendí que las reuniones tienen que ser un espacio de paz, de armonía, de compartir y crear proyectos.
Hace tiempo que decidí que ellos, los padres y las madres son los protagonistas en los espacios en los que en vez de cargar de información, descargamos de tensión y los hacemos sentir " PARTE ".
Dinámicas divertidas y juegos sencillos, que acompañados de un pequeño detalle, los dota de seguridad y confianza.
LA CAJA:
Hay una caja vacía, cuya tapa lleva un mensaje:" todo lo que tu hijo/a necesita está aquí "
Siempre esperamos cosas materiales y cuando vamos cogiendo la caja y sentimos que está vacía, despierta la curiosidad.
Al abrirla hay un espejo al fondo. Si ellos la miran, entienden que en casa, ellos son lo que di hijo/a necesita. Si la miro yo, entiendo que en el cole, el referente soy yo.
BOTE DE LOS DESEOS:
" MI FAMILIA TIENE UN DESEO " :
Presentamos unos trozos de papel .
Cada familia escribe un propósito, deseo ...
Lo colocamos dentro del bote y lo cerramos.
En junio lo volvemos a abrir y valoramos si se han cumplido nuestros propósitos, sueños o deseos.
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